jueves, 11 de agosto de 2016

Tu nombre es de mujer

Prestale un antónimo a tu nombre,
quitale ese trozo que no estorba,
anda, muéstrale que si se puede no querer tanto,
sílbale, ponle sonidos sin sentido,
esfuérzate un poco para sustraerlo, ese poco basta,
deja al descubierto los teñidos de una carne que no opaca,
ese nombre no es tuyo, sálvale,
esta hecho de excepciones,
tu nombre es de mujer.



Los bichos escrupulosos

Algo se constriñe mientras mordisqueo un saltamonte,
pasan estas cosas, que suelen pasar:
da vueltas la taza, Si:
mientras yo me trepo a la boquilla de esa taza.
La piel se evapora, Si:
mientras yo me sumerjo en un poro de esa piel a cuestas.
Los escrúpulos no son de los hombres, No:
la gente no tiene escrúpulos, eso es de los bichos, los chiquitos y minusválidos.
Entonces mientras se sigue achicando el mundo, mientras sigue girando, mientras la gente sigue andando, yo vivo en una ranura.


Hoy te inventaré un nombre

Hoy te inventaré un nombre, 
acércate al silencio del fuego, 
bautizado por sus pellizcos de cera,
te llamaré molinero, si insistes.
mientras maceramos un mejor nombre.

Hoy te arrancaré tus letras, insisto
desnudo tal cual faisan, dotado de alas de piel, 
que apenas sirven para no volar, 
te llamaré entonces jilguero, 
mientras atraviesas las membranas del fuego.

Hoy ya dejaras tu palabra de piedra,
seras nadie, uno y todos, beberás el sabor de ser ninguno,
te parecerás mas al tejido vivo de un papel derretido,
pues tu nombre, se escabulle entre tus dedos.

Se te ha perdido 
tu nombre, se te ha perdido.
Insistiré, insistiré en ello.


 

miércoles, 10 de agosto de 2016

Caminante de ciudades

Cuéntame amiga,
de donde has salido por las noches,
de que ciudades,
de que tormentos,
de cuantos pasaportes vencidos,

cuéntame sobre tus añoranzas, y desventuras,
emigrante de corazón, que alma su pedazo de tierra,

el polvo también viaja,
las fotos, los recuerdos,
las canciones hablan de eso.

cuéntame de ti amiga,
de tu lengua viajera,
de tus ojos y tus lágrimas
esas que recorren
esas que caminan
esas inquietas,
que no saben de detenimientos.

déjame ser carta en blanco amiga,
esa que aun piensa sin destinatario,

viajera
amiga del viento y de pasajes
no sabes de alquileres de aterrizajes,
no eres de esas que se introducen en la tierra,
pues andas preocupada por las hojas sueltas.

Caminante de ciudades, ciudades rotas
ciudades amantes,
ciudades despellejadas por el tiempo y sus hombres
eres amiga de la ciudad,
acariciando sus suelos nocturnos,
con tus pies extraños que no saben de la nostalgia del tiempo.

jueves, 4 de agosto de 2016

Para la novia del aire

Allí estas tú,
agitada frente a ese hombre nuevamente,
cada día en dicha esquina,
ese hombre de palmas y cajón,
y tú de bata de cola y castañuelas,
una pasión llevada al poco calculo del riesgo
fuiste a recoger flores, y fuiste raptada
OH! incomprensible inocencia,
que entre tangos y fandangos, fuiste invitada
pequeña Persefone cautivada,
no hay de culpas ni justificaciones,
¿a quien se juzga por una incomodidad del alma?
cuando no se tiene piedad para el sufrimiento,
cuando los pies piden baile, y la mente tormento.
Y ese hombre allí, hablándote de fuego, con fuego.
Allí estas tú, novia del aire,
a costa de aparentar una edad liviana, disimulas un gran padecimiento:
una pasión perturbadora,
que te desgarra el suelo, mientras pides aliento.